Trail
Luca Papi es el primer ganador de Tor des Glaciers
Tor des Glaciers, que, por sus 450 km de distancia y 34,000 m D +, ha ganado el epíteto de "la resistencia más dura del mundo", tiene su primer ganador. O, más bien, vencedor.
Porque Luca Papi, de Varese pero que vive en Francia, cruzó la línea de meta en Courmayeur en 134 horas y 10 minutos, dejando a su seguidor, el belga Richard Victor, a más de 20 km. Su llegada debería esperarse hoy por la tarde. En tercer puesto Masahiro Ono, siempre en los primeros puestos.
Luca Papi fue recibido a la llegada por su esposa e hijo, y se veía fresco como después de una corta carrera: sin fatiga, perfectamente vestido, sonriente y con las manos en el cielo.
"Un viaje extenuante pero sorprendente, donde vi paisajes magníficos y conocí gente maravillosa", fueron sus primeras palabras. “Tuve momentos difíciles en los descensos, algunos muy duros y empinados”. ¿Y las primeras noches de nieve y viento? “Por suerte no soy sensible al frío, siempre corrí con mi camiseta y pantalones cortos; a veces usaba una cazadora y solo una vez pantalones largos ”. Ruta complicada? “Estoy bastante acostumbrado a las carreras con solo un GPS, aunque en estos días he cruzado tierras inmensas y salvajes, y no siempre fue fácil encontrar el camino correcto. Tor des Glaciers es una experiencia excelente, que se volverá a hacer ”. ¿Reuniones en el camino? “Mucha gente amable en los refugios y senderos altos. En Rifugio Coda conocí a Oliviero Bosatelli, ha sido útil hacer parte del camino con él, hasta que nuestros caminos se dividieron”.
Detrás de los primeros tres, unos sesenta corredores (de los 98 que partieron) se diluyeron a lo largo de los últimos 100 km de la ruta. Definitivamente un buen número, consideró las dificultades de esta carrera fascinante pero dura.
Quedaron dos mujeres en la carrera. Marina Plavan, la primera desde el principio, ahora está en Rifugio Duca Degli Abruzzi, bajo el Cervino, y Anouk Baars, que aún no ha llegado allí.
Luca Papi fue recibido a la llegada por su esposa e hijo, y se veía fresco como después de una corta carrera: sin fatiga, perfectamente vestido, sonriente y con las manos en el cielo.
"Un viaje extenuante pero sorprendente, donde vi paisajes magníficos y conocí gente maravillosa", fueron sus primeras palabras. “Tuve momentos difíciles en los descensos, algunos muy duros y empinados”. ¿Y las primeras noches de nieve y viento? “Por suerte no soy sensible al frío, siempre corrí con mi camiseta y pantalones cortos; a veces usaba una cazadora y solo una vez pantalones largos ”. Ruta complicada? “Estoy bastante acostumbrado a las carreras con solo un GPS, aunque en estos días he cruzado tierras inmensas y salvajes, y no siempre fue fácil encontrar el camino correcto. Tor des Glaciers es una experiencia excelente, que se volverá a hacer ”. ¿Reuniones en el camino? “Mucha gente amable en los refugios y senderos altos. En Rifugio Coda conocí a Oliviero Bosatelli, ha sido útil hacer parte del camino con él, hasta que nuestros caminos se dividieron”.
Detrás de los primeros tres, unos sesenta corredores (de los 98 que partieron) se diluyeron a lo largo de los últimos 100 km de la ruta. Definitivamente un buen número, consideró las dificultades de esta carrera fascinante pero dura.
Quedaron dos mujeres en la carrera. Marina Plavan, la primera desde el principio, ahora está en Rifugio Duca Degli Abruzzi, bajo el Cervino, y Anouk Baars, que aún no ha llegado allí.
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